Pan de muerto

No es mi primer pan de muerto aunque si es la primera vez que consigo fotografiarlo antes de zampárnoslo y eso, en esta casa, tiene bastante mérito. Ya hubo un año que sí llegué a sacarle alguna foto pero no quedé muy contenta con el resultado y decidí no postear. ¡Qué le voy a hacer si soy así de exigente conmigo misma!

Pero este año se han alineado los planetas y aquí te dejo este delicioso pan dulce mexicano el cual  habitualmente se consume el día 1 y 2 de noviembre para festejar el día de los muertos.

Un espectacular pan aromatizado con naranja, muy blandito y que por lo menos a mi, me recuerda bastante a nuestro roscón de reyes.

Otros años hago uno o dos panes grandes pero este año he decidido seguir al pie de la letra la receta de Irene e Iván de "Pimienta dulce" y hornearlo en forma de 6 bollitos de un tamaño más pequeñito y más manejable.

Para obtener un buen resultado es imprescindible organizar bien los tiempos:

Día 1: preparar prefermento.

Día 2: preparar masa.

Día 3: hornear.

Y sin más preámbulos, aquí la receta que triunfa en esta casa todos los años por esta época.

Receta de pan de muerto

Ingredientes

Para el prefermento

• 40g de harina de fuerza
• 55 ml de leche
• 9 g de levadura fresca o 3 de levadura seca de panadero
• 8 g de azúcar

Para la masa

• 350 g de harina de fuerza
• 80 g de azúcar
• 2 huevos L
• 2 yemas
• 5 g de sal 
• 5 g de agua de azahar
• 3 g de levadura fresca o 1g de levadura seca de panadero
• ralladura de 2 naranjas grandes
• 100 g de mantequilla
• 110 g de prefermento

Para decorar

• 30 g de mantequilla derretida
• azúcar

Preparación

1. Mezclamos todos los ingredientes del prefermento en un bol, tapamos y reservamos en la nevera toda la noche.
2. Al día siguiente, en el bol de la batidora ponemos todos los ingredientes de la masa (exceptuando la mantequilla y ralladura de naranja) y el prefermento. 
3. Amasaremos con el accesorio gancho unos 20-25 minutos pero a mitad del amasado añadiremos la ralladura de naranja y poco a poco la mantequilla fría a trocitos.
4. Cuando obtengamos una mezcla lisa y homogénea, sabremos que está lista. Cubrimos el bol con papel film y dejamos fermentar en la nevera toda la noche.
5. Al día siguiente nuestra masa habrá doblado su volumen. Sacamos de la nevera y dividimos en 6 porciones de unos 100-110 g (para los panes) y 12 de 15 g (para los "huesos")
6. Con cada porción grande formamos una bola y con las pequeñas, ayudados de los dedos índice, corazón y anular, formaremos los huesos que pondremos de forma cruzada sobre los panes.
7. Ponemos los panes sobre una bandeja, cubrimos con papel film y dejamos fermentar hasta que doblen su volumen. 
8. Horneamos durante 20 minutos a unos 175-180º o hasta que estén dorados. 
9. Sacamos del horno, dejamos enfriar sobre una rejilla, pintamos con mantequilla derretida y espolvoreamos con azúcar.

Se conserva blandito un par de días aunque una vez lo pruebes dudo mucho que aguantes tantos días sin comértelo todo. 

¿Conocías esta receta? ¿La has horneado alguna vez? De lo que estoy segura es de que si la preparas una vez repetirás porque este tipo de masas con tanto aroma enganchan mucho.

¡Feliz semana!

Yaiza